Miras a tu alrededor y no confías en nada.
Te miras en el espejo y te das cuenta de que no confías ni siquiera en ti mismo.
Sientes algo raro, piensas que no merece la pena nadar para morir ahogado en la orilla.
Das por cada paso al frente dos hacia atrás, te complicas tu meta...
Vuelves a mirar a tu alrededor...
Falserío.
Son ganas de joderte la vida...
Pero no des la satisfacción de que se cumpla el tópico, tú solo y que se joda el mundo.
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