Hola. ¿Te acuerdas de mí?
Soy aquella persona que te hablaba todos los días.
Que se preocupaba por ti, que al más mínimo cambio estaba ahí.
Sí, ya veo que te empiezo a sonar.
¿Sabes? El problema es ese.
Después de todo, ni lo recuerdas.
Todo aquello que hice por ti.
Todas esas horas que pasamos hablando.
¿Qué fueron para ti? Nada.
Solo fui uno más. O quizás ni siquiera pude llegar a eso.
¿Te parece justo? Porque a mi no.
Y lo peor es que sigo aquí, intentándolo.
¿Quién me devolverá mi tiempo desperdiciado en ti?
Nadie.
Simplemente te diré una cosa:
Si vives en tu propio mundo se te puede escapar la cosa más maravillosa de tu vida...
No hay comentarios:
Publicar un comentario