sábado, 15 de septiembre de 2012

Volvemos a antaño

Sales de tu casa. Cruzas esa puerta que te separa de la calle y sales al mundo.
Un coche pasa por delante tuya en la carretera.
A partir de ahí tu mente puede hacer dos cosas al fijarse en la persona que lo conduce.
Todo sucede en segundos.
Puedes comenzar a pensar en esa persona...

¿A dónde irá? ¿De dónde viene? ¿Le espera alguien? ¿O quizás huya de algo?
¿Vive solo? ¿Se sentirá querido? ¿Qué problemas tendrá? ¿Cuál es su objetivo en ese viaje?

O puedes pasar del coche, es la verdad, no va para nada contigo.

¿Qué te importa la vida de los demás? ¿No tienes suficiente con la tuya?
''Vas hacia el Camino, y si no cuidas tus pasos no sabes hacia donde te arrastrarán''
 Si la persona que ha leído esta entrada no la ha entendido, debería pensar.
''Hay tantos puntos de vista como personas estén mirando algo''

Más cabeza y menos corazón. O menos cabeza y más corazón.
¡Volvemos a antaño! Es mejor que el silencio

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